La adicción de trabajar en la VERTICAL
Locos e incomprendidos, exceso de arrojo, bomberos de enciclopedia, algunos de los epítetos que en esta década nos hemos ido acostumbrando a escuchar, desde nuestras familias, amigos, cofrades y conciudadano, al principio, hasta nos dolían, con el paso del tiempo nos hace sentir orgullosos. Y si bien es cierto, no todos permanecen, los que pasan por este equipo no olvidan el vigorizante tránsito de la adrenalina por todo el torrente sanguíneo, cuando pasa del natural estado de tener el suelo firme a los pies, a sentir que la vida pende de un hilo… de una cuerda en estricto rigor.
En la vertical, el medio que hemos elegido, entrenamos no solo por lo adictivo que es el peligro, sino que tambien porque en la especialidad que hemos desarrollado, los momentos de mayor riesgo, los mas especializados y técnicos, son en el aire y operando colgado de cuerdas, utilizando ferretería especializada y aplicando la física en el desarrollo de ventajas mecánicas.
Hay operativos en que solo tendremos que caminar, largos trechos, buscando alguna persona extraviada, pero habrá otros en que un vacío nos separe de la persona en peligro, a mal traer, accidentada o extraviada, y los rescatistas que podemos llevarla a un lugar seguro Esos rescatistas, esos locos que Ud ve los fines de semana colgando en algún puente de la comuna, entrenan y se arriesgan por usted.
El grupo de Rescate Técnico del Cuerpo de Bomberos de Curacautín, cuenta con personal especializado, que certifica sus capacidades a través de empresas externas, tiene una malla exigente y no solo debe capacitarse en esto, además debe cumplir con todo el entrenamiento de un bombero regular.