A pesar de que el Invierno, en temas estrictamente de calendario, ya concluyó, el clima sigue requiriendo de que nuestros hogares se calefaccionen, pero pareciera que estamos bajando la guardia con las precauciones que requiere mantener fuego en estufas y cocinas.
Hemos vivido una oleada de nuevas emergencias de fuego en viviendas, cuyo origen es la inflamación de un ducto de evacuación de gases de cocinas o estufas, los que propagados, generan emergencias mayores, especialmente condicionado a los materiales de construcción asociado a la mayoría de las viviendas de nuestra comuna (madera o derivados de ella)
Consultado, el Capitán de la 2da Compañía de Bomberos, Javier Molina Monje, declara que «generalmente cuando el fuego alcanza el entretecho, la madera que lo constituye ya ha pirolizado o vaporizado suficiente como para que el fuego avance rápido, sin duda a una velocidad mayor que la que podemos llegar nosotros, por lo que nuestro trabajo se basa en limitar el avance del incendio, haciendo esfuerzos por que el daño no aumente, por lo que la clave de esto es evitar que el fuego se inicie». La receta; una limpieza y mantención adecuada de los cañones. De forma periodica, mensual, revise y limpie sus cañones, con esto evitará que su vivienda sea afectada por un incendio.