Pareciera que el tiempo vuela, un 15 de diciembre se funda en Curacautín el motivo que ha congregado a hombres y mujeres en torno a un solo fin; la protección de la comunidad ante emergencias y desastres.
La Segunda Compañía se funda con 25 socios cooperadores y 45 voluntarios, siendo su primer Capitán don José Armando Valdebenito. El 14 de abril de 1956 en la ex plaza 21 de mayo, donde actualmente se ubica el hospital, prestan juramento ante la comunidad estos hombres que como lema se han impuesto estar «Siempre Alertas».
En una institución de por si celosa de los nuevos integrantes, siempre fue dificultoso escalar en ella, por esa razón la llamaron sus miembros, desde un comienzo, «La Esmerada» y así quedó hasta el día de hoy. Funcionaron en un comienzo en el camión facilitado por uno de los voluntarios, donde cargaban cuerdas, baldes y hachas para cumplir el objetivo plasmado en su acta de fundación; «Salvataje de vidas, propiedades y especies contra los riesgos de incendios y siniestros que afecten la seguridad pública.
Hoy, 59 años después, nosotros los encargados de mantener las tradiciones de entrega y profesionalismo, honramos a nuestro fundadores meditando desde lo profundo de nuestro corazón, con humildad y sueños. «No importa que el camino sea una gran hoguera, que unidos por siempre nadie nos vencerá», como el himno «La Casaca Roja» escrito por el Comandante Flerys Sandoval Saavedra, inmortalizado en la foto que sigue vistiendo orgulloso la cotona que tanto amó.
Nacimos como compañía de Zapadores y nos mantenemos fieles a esos principios hemos complementado con la excelencia en el trabajo de agua, una preparación constante en buen manejo de caudales y hemos logrado ser el referente regional en Rescate Técnico y operaciones Verticales, sin dejar de lado los incendios forestales, cuyo combate mantiene el patrimonio de todos, nuestra flora y fauna.